Hola, espero que estén bien y que hayan tenido una semana cargada de descanso y felicidad, de paso les deseo un muy buen inicio de semana y les agradezco por leer un lunes más las publicaciones de Todo con Amor, poco a poco vamos creando un espacio de interés para todos y todas.
Día a día vivimos en una realidad llena de interrogantes, expuestos/as a espacios de vulnerabilidad, de factores estresores y de situaciones que nos pueden afectar tanto de manera física como mental. Es ahí donde entra el tema de ser resiliente.
Para comenzar, ¿Qué significa resiliencia? Si buscamos en Google la primera definición que nos va a salir es “la capacidad de los seres humanos para adaptarse positivamente a las situaciones adversas.” Sin embargo, va más allá de una simple adaptación.
Es todo un proceso de reconstrucción, es tomar la situación adversa y convertirla en una fortaleza. Se trata de asimilar, comprender y trabajar para recuperar esa estabilidad en donde nos podamos sentir plenos/as y seguros/as.
Conlleva una serie de aprendizajes que nos conducen al éxito, fortalece habilidades como la resolución de conflictos, la toma de decisiones, la autodisciplina, la autoestima y el pensamiento crítico.
Hay que tomar en cuenta que no solo influyen factores personales sino también el entorno físico y social en el que se convive diariamente. Es importante tener redes de apoyo como la familia, pareja o grupo de amigos/as que nos sirvan como soporte en los distintos momentos del proceso.
No es un tema meramente individual, puede ampliarse a un tema más colectivo, tal es el caso de la situación actual; como comunidad tenemos la capacidad de adaptarnos y sobrellevar la situación para poder generar resultados positivos.
¿Cómo ser resiliente?
Desde Trabajo Social, se busca potencializar las habilidades de las personas y buscar las herramientas necesarias para mejorar su calidad de vida, cabe resaltar que cada persona lleva un proceso diferente acorde a sus necesidades. Sin embargo, hay ciertas cosas que pueden contribuir a la construcción de un ser resiliente:
- Conocerse así mismo, sus fortalezas y debilidades.
- Autocuidado (importantísmo) buscar espacios de reflexión y atención a sus necesidades.
- Fijar metas.
- Fijar límites.
- Buscar alternativas de solución.
- Optimismo.
- Perseverancia.
Es importante la aceptación del cambio y recordar que a pesar de la adversidad de la situación siempre hay cosas por las cuales estar agradecido/a.
Por último, les dejo esta frase para reflexionar de Bob Goddard que dice así “Cuando crees que todo está perdido, el futuro permanece.”, somos capaces de esto y mucho más, y como les he dicho antes siempre con el propósito de convivir en una sociedad más justa y más humana. Espero que les haya gustado el tema de hoy y hasta el próximo lunes.
Un abrazo.
Wow, gracias por llenarme y enseñarme de tu gran corazón con esas palabras amiguita. 🤩❤️