Gracias por estar un lunes más de Todo con Amor, espero que les haya gustado la entrada de la semana anterior, pronto vuelvo con una dinámica similar. De paso les deseo un excelente inicio de semana y que estos días vengan cargados de energía.
Con el tema de hoy los y las invito a crear ese espacio de reflexión y conexión con ustedes mismos/as, y que poco a poco ese amor propio vaya creciendo y apoderándose de ustedes.
Casi que nos pasamos la mayor parte del tiempo intentando complacer a las demás personas en muchos sentidos, pero ¿en qué momento nos damos el espacio para complacernos a nosotros/as mismos/as?
Aprender a aceptarnos y amarnos es un proceso largo y diferente para cada persona, en una sociedad que todo lo juzga, todo lo reprime y todo lo cuestiona se vuelve un poco más tedioso, por lo que el amor propio es una tarea que tenemos día con día.
Sentirnos bien con nuestro propio ser y estar en armonía con nuestro cuerpo, nos brinda la oportunidad de crecer personalmente, de florecer y de identificar plenamente el valor que merecemos.
Enfrentarnos a los desafíos de la vida nos permite desarrollar la capacidad de tomar mejores decisiones y relacionado a esto, aumentar nuestra confianza en nosotros/as mismos/as.
El camino para mejorar y construir una autoestima sana merece esfuerzo y siempre deja un aprendizaje del cual se le puede sacar provecho. Es una trayectoria donde aprendemos a reconocer nuestros propios errores, lo que nos hace bien y lo que merecemos.
Saber perdonarnos, a dejar ir aquello que nos hace mal de cierta forma, aprender a no compararnos con los/las demás y festejar nuestros triunfos y alegrías. Todos y todas somos diferentes, por lo que la empatía es clave en el proceso de sanación, conocer nuestros límites y respetar los límites de los/las demás.
Somos dueños/as de nuestro futuro y siempre es bueno buscar esos espacios de crecimiento y autorrealización, en busca siempre de sentirnos felices y brindarnos tiempo para nosotros/as mismos/as.
Cabe recalcar que hay días buenos y malos, pero es ahí donde aprendemos a ser un poco más resilientes día con día y logramos ver desde diferentes perspectivas la realidad.
Para finalizar les dejo esta frase de Jean Shinoda Bolen “Cuando recuperes o descubras algo que alimenta tu alma y te trae alegría, encárgate de quererte lo suficiente y hazle un espacio en tu vida” siempre darnos el espacio para reflexionar y agradecer sobre todo lo bueno que nos da la vida.
Hasta el próximo lunes, un abrazo.
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